Cómo mejorar nuestra vida interior

La necesidad de protegernos de las temperaturas exteriores no es privativa de una época específica del año. En invierno, el frío atenta contra la calidad de vida en el interior de las casas; en verano, las altas temperaturas frecuentemente nos impiden descansar o desarrollar normalmente las actividades domésticas. Estas situaciones las atemperamos con equipos de frío y calor que ayudan a conseguir climas interiores agradables, pero consumen mucha energía y ese gasto se refleja cada vez más en las facturas de electricidad y de gas.

La eficiencia que logra el DVH
La arquitectura actual abre los edificios a su entorno. Valoriza la conexión con el exterior, las visuales y la luz. Aún las casas de estilo ampliaron sus ventanas, incorporaron paños fijos, y reemplazaron muros de mampostería por paños vidriados, para responder a las premisas de la época. Esa mayor participación del vidrio en la materialización de la envolvente, lo convierte en el principal factor de valoración del desempeño de las ventanas, mucho más que los perfiles. Por ese motivo, si la idea es impedir que el frío y el calor condicionen nuestro hábitat, la elección del vidrio es, claramente, DVH Ekoglass.
Ekoglass es un doble vidrio aislante (DVH), herméticamente sellado, que encierra en su interior una cámara estanca de aire deshidratado o gases inertes para mejorar el comportamiento térmico y acústico, favorecer la eficiencia energética y ofrecer control solar mediante vidrios que específicamente cubren las distintas necesidades.

Un contundente 35%
En la especificación correcta de los vidrios que componen un DVH, se consideran aspectos vinculados a la seguridad de las personas, y a la eficiencia térmica y acústica que proporcionan.
Con Ekoglass instalado en las ventanas, el ahorro en el consumo de climatización puede llegar hasta el 35% comparado con vidrios simples. Este porcentaje de ahorro es muy significativo si ponemos en la balanza razones tan importantes como la sustentabilidad del planeta y los beneficios funcionales con los que debe contar una vivienda. Entre ellos, lograr menor consumo energético sin comprometer el confort climático interior.
Y más aún, si se especifica Ekoglass Energy –que incluye un vidrio Low E en su composición- se logrará una aislación 35% mayor que la de un DVH común, similar a la que ofrece un muro de ladrillos de 30 cm de espesor.

Ruidos en el Paraíso
Los ruidos siempre se asocian a las ciudades. Se entiende que las zonas urbanas, con vehículos trajinando calles a toda hora, sirenas, bocinas y actividad constante, sean inevitablemente ruidosas. DVH Ekoglass cambió esta realidad en los interiores de los edificios, nuevos y reciclados, que lo incorporaron como elemento capaz de ofrecer ambientes acústicamente agradables, aún en el medio de una city como la porteña, por ejemplo.

La eficiencia acústica demostrada por el DVH Ekoglass ante las exigencias urbanas, es el motivo por el que lo vemos instalado también en viviendas afuera de las ciudades, en clubes de campo, barrios privados y zonas con menor densidad poblacional pero donde las actividades propias de cada lugar provocan ruidos que un DVH en la ventana puede perfectamente evitar. La tranquilidad bucólica asociada a “vivir afuera” no tiene por qué desaparecer cuando los niños gritan en la piscina, el ruidoso tractor corta el pasto, las canchas de tenis o la plaza de juegos infantiles están pegadas al dormitorio, las mascotas ladran y los adolescentes deciden escuchar música en el jardín, entre mil situaciones más, que disfrutamos siempre que no invadan nuestros momentos de descanso.
Con Ekoglass es posible lograr la solución que garantiza un alto grado de aislación del ruido exterior protegiendo la tranquilidad de nuestros ambientes.

Todo el proceso de fabricación de Ekoglass está controlado y respaldado por VASA.
Más información en :
W: www.ekoglass.com.ar
IG : @ekoglass_intl