Casa Tao está ubicada en un lote rodeado de vegetación y largas visuales hacia la laguna de una urbanización privada en la zona norte del Gran Buenos Aires. El proyecto se adapta a las necesidades de una familia que, consciente de la importancia del equilibrio energético en su vida cotidiana, pidió que se rigiera por los principios del feng shui. “La arquitectura, como manifestación del entorno construido, tiene el poder de influir en la calidad de vida de sus ocupantes -afirman los arquitectos responsables de OON Architecture, estudio a cargo del proyecto-. En este contexto, la obra es un ejemplo…
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Casa Tao está ubicada en un lote rodeado de vegetación y largas visuales hacia la laguna de una urbanización privada en la zona norte del Gran Buenos Aires.
El proyecto se adapta a las necesidades de una familia que, consciente de la importancia del equilibrio energético en su vida cotidiana, pidió que se rigiera por los principios del feng shui.
“La arquitectura, como manifestación del entorno construido, tiene el poder de influir en la calidad de vida de sus ocupantes -afirman los arquitectos responsables de OON Architecture, estudio a cargo del proyecto-. En este contexto, la obra es un ejemplo de diseño que integra lineamientos del feng shui y la filosofía taoísta con la racionalidad de una arquitectura atemporal, que busca no solo la estética, sino también la armonía y el equilibrio con la naturaleza.
El encargo propuso un desafío, no solo desde lo proyectual sino también desde lo documental, ya que los mencionados lineamientos hacen foco en la disposición y orientación de los espacios, la circulación de la energía para la generación de un hábitat equilibrado, y en el trazado y diseño de las instalaciones. La búsqueda de una perspectiva de simplicidad y respeto por el entorno enfatiza la importancia de vivir en armonía con los elementos naturales que se incorporan en el diseño, como la madera y la vegetación, el metal, el fuego y el agua.
Una visión total revela el carácter volumétrico del proyecto. Piezas apoyadasy ordenadas unas sobre otras organizan el programa en tres niveles. Volúmenes superiores negros e inferiores claros en equilibrio, como una suerte de abstracción de un yin yang material. La planta baja es social, y se materializa a través de un basamento de hormigón sobre el cual se apoya un segundo nivel con espacios privados. Esta planta es cuadrada y conforma un volumen puro, completamente vidriado en sentido frente-contrafrente y opaco hacia los laterales. Finalmente, como remate aparece el último nivel apoyado sobre el anterior, volando sus extremos en equilibrio, intentando adentrarse en el espacio aéreo exterior y buscando cercanía y visuales hacia la laguna.
Al aproximarnos a la casa nos encontramos con una serie de situaciones que particularizan la experiencia del ingreso. Una serie de parasoles corredizos pueden ocultar o mostrar la plaza de acceso, acompañada por un espejo de agua con plantas naturales y peces coi, mientras diferentes situaciones semicubiertas y pérgolas de hormigón gradúan la luz natural hasta atravesar la puerta principal.
En el ingreso, los espacios se articulan en torno a la figura de un patio interno en triple altura y escalera, organizando la planta. En los ambientes interiores la madera aparece como el material protagonista que va integrando los ambientes entre sí a través de continuidades en cielorrasos y paredes, y las caras completamente vidriadas crean una suerte de fluencia con los espacios exteriores inmediatos. Los ambientes sociales se integran con el área de piscina que inicia en la galería y remata en su extremo con un voladizo sobre el desnivel del fondo del terreno, como fusionándose con la laguna.
El patio interno y el núcleo vertical dividen la planta alta en dos alas de dormitorios.
Hacia el frente dos suites y hacia el contrafrente la suite principal con un baño con patio interno propio. La conceptualización de este volumen se materializa con caras laterales completamente ciegas de paneles de aluminio compuesto color negro, que contrastan con las caras completamente desmaterializadas a través del uso de un sistema de aberturas poco tradicionales para una vivienda. El uso del curtain wall logra la integración visual total desde el interior de los dormitorios hacia el exterior, y desde afuera refleja el paisaje y mimetiza la casa con el medio circundante, equilibrando la volumetría contundente y geométrica e integrándola al entorno de manera natural.
En los extremos en voladizo del último nivel se instaló una sala de cine y una oficina con visuales panorámicas hacia el barrio. En la parte central de esta planta se encuentran las dependencias de servicios y un lavadero con patio.
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